Alt Camp: un paseo otoñal y cultural a una hora de Barcelona
Con sus temperaturas suaves, el otoño en Cataluña es la época ideal para largos paseos por la naturaleza y visitas culturales en modalidad de turismo slow. Una de las rutas más fascinantes se encuentra cerca de Tarragona, en la comarca del Alt Camp, a aproximadamente una hora de Barcelona.
Al final de uno de estos bonitos caminos rurales llegamos a Aiguamúrcia y al Monasterio de Santes Creus, una abadía cisterciense fundada en 1160 a orillas del río Gaià. Una verdadera joya arquitectónica. Y como nunca hay aglomeraciones, es ideal para una excursión rápida de un día o un fin de semana corto.
Podrás aparcar en la plaza de Santa Llúcía, justo enfrente de la imponente entrada al recinto, construida como una fortaleza. Un primer contacto visual que no olvidaremos pronto. Accedemos al recinto por la plaza de Sant Bernat que alberga, entre otros, el antiguo claustro del hospital de Sant Pere dels Pobres (siglo XIII), luego pasamos por la plaza de la Iglesia antes de llegar finalmente al Monasterio.
No te pierdas la proyección audiovisual al inicio de la visita (disponible en francés) que cuenta la historia de la construcción del monasterio por monjes y canteros. A continuación se revela una gran sala que sumerge al visitante en la vida rigurosa de los monjes de la época: sacrificios de vida monástica, tiempos de oración, cosecha y trabajo.
La puesta en escena está realmente muy bien lograda, como si nada hubiera cambiado. Casi se esperaría ver una procesión de túnicas blancas llegar por una de sus misteriosas puertas y observarlas sentadas en el refectorio. Es un cambio respecto a las visitas habituales con un simple folleto. Finalmente, una última puerta se abre al claustro trasero para el resto de la visita.
El monasterio, austero y refinado, es uno de los conjuntos monásticos más llamativos y mejor conservados de España. Podemos pasar fácilmente dos horas allí, sobre todo si optamos por coger la audioguía que nos llevará a descubrir los anexos monásticos como la sala capitular y las tumbas reales, el refectorio, el salón, la biblioteca… También es posible reservar un tour con guía para conocer más sobre la vida de estos monjes.
Tenga en cuenta que el claustro principal (siglo XIV), el primer claustro gótico de la Corona de Aragón, se encuentra actualmente en restauración. Una inversión de 3,6 millones de euros para devolverle su antiguo esplendor, de los cuales 1,5 millones financiados por la Fundación La Caixa. Hay que levantar la vista para admirar los ricos elementos decorativos y los diversos personajes que habitan –por no decir acechan– los capiteles del claustro. Al final llegamos a la iglesia, austera como de vida cisterciense.
La Abadía de Santes Creus forma parte de la denominada “Ruta del Cister” creada en 1989 y que incluye otros dos Reales Monasterios de Cataluña: Vallbona y Poblet, que aún acogen a una comunidad de religiosos. En Santa Creus, en cambio, no queda rastro de vida monástica desde hace 160 años. Puedes optar por la visita a los 3 Monasterios con una entrada única que cuesta 15€ y tiene una validez de 2 años.
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Después de esta bonita visita, podrás comer en el pueblo de Aiguamúrcia en el Café Bar Esport que tiene terraza y sirve muy buenos bocadillos. Enfrente, la pequeña boutique Carquinyolis María Teresa vende productos locales y deliciosas magdalenas caseras.
Espacio natural protegido
Por la tarde, dirígete a la Albereda de Santes Creus, un espacio natural protegido, a lo largo del río Gaià para dar un paseo por la naturaleza, sólo para disfrutar de los hermosos y brillantes colores del otoño. El acceso está bien señalizado: saliendo del Monasterio basta con tomar la calle de Pere el Gran, girar a la izquierda y bajar las escaleras. Llegamos a un merendero bien sombreado. Pasamos por delante de la Font de les 6 fonts y luego iniciamos un delicioso paseo sobre una alfombra crepitante de hojas de naranja y ocre, mientras resuena el suave chapoteo del arroyo. Momento ASMR garantizado. A medida que el camino se hunde en la maleza, aparecen formas extrañas: ¿criaturas extrañas o árboles torcidos?
Finalmente es interesante dirigirse a Valls situada a unos 20 minutos de Aiguamúrcia. Ciertamente, la ciudad moderna – ya sea de lejos o de cerca para ser honesto – no parece gran cosa y no invita a dar un paseo a primera vista. Pero el centro histórico merece una parada. Aparcaremos en el parking gratuito de Hort del Carme, que se encuentra a unos pasos del casco antiguo. Pasaremos por delante de la iglesia carmelita de estilo barroco, declarada Bien Cultural de Interés Local. También hay que ver otros edificios como Ca la Massona, un precioso edificio del año 1914, el antiguo Hospital de Sant Roc de estilo renacentista y barroco, el Ayuntamiento, la plaza del Blat y la iglesia de Sant Joan del siglo XVI.
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Varias rutas turísticas permiten descubrir Valls desde otro ángulo, como la Ruta Literaria Narcís Oller, escritor y abogado nacido en Valls.
Por último, una curiosidad local que no encontrarás en ningún otro lugar: el Museo Castellers “Món Casteller”. Un edificio muy moderno inaugurado en 2023 y que, sin embargo, está dedicado a un símbolo catalán que existe desde finales del siglo XVIII: los “castells”, estas torres humanas que pueden alcanzar los 10 pisos.
Escapada de otoño cerca de Barcelona – Información práctica
Reserva y horarios de la Visita al Monasterio de Santa Creus en patrimoni.gencat.cat
El Monasterio está abierto de martes a domingo. Entrada gratuita el último martes del mes entre el 1 y el 30 de junio.
Ruta del Cister: larutadelcister.info