Año Nuevo: el origen de la tradición española de las 12 uvas
Es una tradición en España, la transición al nuevo año se hace degustando la uva. Más concretamente, 12 uvas, que comemos el 31 de diciembre al ritmo de “campanadas”, el sonido de las campanas a medianoche.
¿De dónde viene esta tradición? Florence Siguret, guía francesa de referencia de Barcelona Sino, nos explica su historia.
Es 31 de diciembre, es casi medianoche, la multitud corre en el frío hacia la legendaria Puerta del Sol de Madrid (y hacia cualquier plaza española con un campanario). Mientras tanto, otros encienden la televisión para ver el acto en directo, con las cámaras enfocadas en la esfera del reloj de la Real Casa de Correos. Todos están listos, con sus 12 uvas. De repente, las campanas empiezan a sonar y dan las 12 campanadas de medianoche una a una. En la multitud y en los hogares, con cada golpe, se traga una uva. El día doce, hay una explosión de alegría, seguida de abrazos, buenos deseos y champán. Así es vivir en España.
Una tradición reciente
Dos fenómenos disputan la autenticidad del origen de las uvas la noche del 31 de diciembre: una sátira de la alta sociedad española y cosechas excepcionales. En realidad, ambos se complementan y contribuyen a la institución de la tradición. El ritual de las 12 uvas nació a finales del siglo XIX en Madrid. En aquella época, la población estaba acostumbrada a salir de fiesta la noche del 5 de enero cuando estaba permitido casi todo. Sin embargo, en 1882, para evitar excesos y excesos, las autoridades madrileñas impusieron un impuesto de 5 pesetas por el derecho a salir a la calle esa tarde. Una cantidad considerable.
En respuesta, la gente comenzó a reunirse el 31 de diciembre en la Puerta del Sol de Madrid, llevando uvas y champán para burlarse de las clases adineradas. Efectivamente, en aquella época la alta sociedad española quería imitar a las familias ricas francesas: celebrar el paso al nuevo año con champán y uvas.
Entonces, ¿a quién se le ocurrió la idea de comerse una uva cada vez que suena la campana? El misterio permanece. Aun así, el ritual fue mencionado en la década de 1890 en los periódicos españoles.
Posteriormente, en 1909, una producción espectacular en Murcia y la región de Alicante dio a los productores una idea fantástica: proporcionar lotes de 12 uvas listas para degustar en Nochevieja. Una iniciativa comercial denominada “Las Uvas de la Suerte” que confirmará definitivamente la tradición, al tiempo que liquidará existencias.
Imprescindible para las celebraciones de fin de año.
Hoy en día, el ritual es imprescindible en las celebraciones de fin de año, ¡sobre todo porque trae suerte! En efecto, con cada grano, símbolo de cada uno de los 12 meses del año, debes pedir que un deseo se haga realidad. Si llegas al final de las 12 campanadas de la medianoche, tendrás garantizado un año feliz y próspero y la suerte te sonreirá. ¡Cuidado, no es tan fácil mantener el ritmo y llegar al final de los doce golpes estando sincronizado! Tienes exactamente 3 segundos entre cada sonido de campana para masticar y tragar tu uva. Un pequeño consejo para maximizar tus posibilidades, toma granos pequeños, sin semillas. ¡Algunos incluso llegan a pelarlos primero!
Si no te gustan las uvas, siempre puedes sustituirlas por aceitunas (sin hueso, por supuesto), frutos secos o gajos de clementina. ¡Al final no importa, lo que importa es compartir un buen rato con las personas cercanas a ti! Para los niños menores de 5 años que quieran participar en la fiesta, los pediatras recomiendan cortar las uvas en trozos, a lo largo, para evitar cualquier riesgo de asfixia. Cada año, el 1 de enero, la prensa informa sobre historias dramáticas que podrían haberse evitado.
En Barcelona, para vivir y disfrutar plenamente del estilo español, reúnete el 31 de diciembre a partir de las 23 horas en la Avinguda de la Reina Maria Cristina, cerca de Plaça Espanya. ¡Música, espectáculos y fuegos artificiales nos acompañarán para despedir el 2023 y entrar en el nuevo año 2024 de forma festiva!
