En Barcelona, un restaurante mítico del Eixample reabre sus puertas
Un restaurante mítico de Barcelona reabre sus puertas para ofrecer cocina tradicional española con un toque de gastronomía francesa. Este Café-Bar, reconocido culturalmente en la ciudad por su decoración modernista, tiene capacidad para un centenar de asientos.
En el número 362 de la calle Consell de Cent, un establecimiento mítico del Eixample ha reabierto sus puertas para volver a recibir a sus clientes. El restaurante Reñé, primero una fábrica de chocolate creada en 1892 por la familia del mismo nombre, luego alberga un restaurante inspirado en los bistrós parisinos con una arquitectura modernista. Una alianza típicamente franco-catalana.
Declarado Bien de Interés Cultural por el Ayuntamiento de Barcelona, este Café-Bar ha conservado su decoración modernista de la época. Decorado por el carpintero catalán Enric Llardent, dos materiales hacen de este establecimiento un lugar de referencia: el mármol para los zócalos de las ventanas y la caoba cubana para todos los marcos.
Fue en 1892 cuando Josep Antoni Reñé decidió abrir su fábrica de confitería-chocolate en el centro del Eixample. Luego pasó a ser exclusivamente una pastelería, a partir de 1910, donde se reunía toda la burguesía barcelonesa.
Tras un cierre de 10 años, de 1993 a 2004, el establecimiento se renovó y pasó completamente a la restauración para ofrecer una experiencia gastronómica con un aire modernista. Pero este 2020, como muchos establecimientos de Barcelona, el Restaurante Reñé cierra sus puertas debido a la pandemia. Por tanto, este lugar de referencia lleva casi 4 años sin vida.
Por lo tanto, con la esperanza de revivir este lugar legendario de la ciudad, una pareja ucraniana asumió el desafío de relanzar este lugar lleno de historia. Novedad esta vez: música en vivo para acompañar la comida. A la Carta: cócteles elaborados, platos mediterráneos con productos de mercado, además de tapas y postres artesanales.
La reapertura del establecimiento no habría sido posible sin la participación de Lonesome Dog, compañía fundada en Londres en 2014. Especializada en música con un estudio de grabación en la capital británica, la compañía quiso diversificarse con este proyecto en Barcelona. La idea: fusionar espectáculos musicales y gastronomía.
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