En el MACBA, los suburbios de Barcelona se exponen en fotografías
Equinox ha ido a visitaros la nueva exposición del MACBA, “Una ciudad desconocida bajo la niebla. Nuevas imágenes de los barrios de Barcelona. Un relato social, geográfico e histórico que cuestiona la ciudad, sus límites y sus transformaciones.
Trozos de paredes deterioradas, ancianos jugando a las cartas, imágenes de Nou Barris, Raval, Vallbona… En “Un pueblo desconocido bajo la niebla. Nuevas imágenes de la Barcelona de los barrios » la nueva exposición del MACBA, trece encargos, principalmente fotográficos –aunque se cuelan algún vídeo y obras plásticas–, cuentan la historia plural de los suburbios de Barcelona.
Los distritos periféricos de Barcelona se desarrollan principalmente en dos áreas geográficas opuestas: al norte y noroeste, cerca del río Besòs y la sierra de Collserola, y al sur y sureste, incluyendo los barrios históricos del Raval, Gòtic y el entorno de Montjuïc. cerca del puerto y de la Zona Franca. Son estos territorios, habitados tras movimientos migratorios de posguerra, los que aquí se entienden a través del lente crítico de la fotografía.
En contradiscurso de la publicidad, la fotografía como motor central de la exposición pretende presentar estos barrios como perspectivas de evolución de Barcelona, que avanza inexorablemente hacia la gentrificación de su periferia.
Flamenco, campo y urbanidad
A veces demasiado intelectual, la exposición se salva con algunas obras más accesibles como la del artista Pedro G. Romero, que cuenta la historia compartida del flamenco y Nou Barris. Más adelante, un conjunto fotográfico muestra los rostros de los habitantes de Can Paguera y Bon Pastor, dos barrios aislados de Nou Barris y Sant Andreu respectivamente.
A medida que avanzamos por las habitaciones, donde se entrelazan el campo, la ciudad y los suburbios, salta a la vista toda la cuestión de la urbanidad: ¿qué significa la ciudad? ¿Dónde termina y comienza la campaña? ¿Cómo se define un suburbio? ¿Es geográfico o social?
Frente a todas las diferentes caras de la ciudad, es el espectáculo de la imparable marcha de transformación lo que se desarrolla ante nosotros. Y si todas estas preguntas complejas a veces confunden al visitante, afortunadamente las numerosas etiquetas explicativas facilitan la comprensión.
Poética, política y divulgativa más que artística, “Una ciudad desconocida bajo la niebla. Nuevas imágenes de los barrios de Barcelona” no es una exposición para todos. Cuando nos vamos, todavía tenemos la sensación de comprender un poco mejor los desafíos de la ciudad, y especialmente su futuro.