La moda española, sigue siendo la más barata de Europa
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Comprar ropa en España es más barato que en el resto de Europa, sobre todo cuando te gustan las marcas de moda rápida. Descifrado.
Si España no es especialmente reconocida por su alta costura, lo es mucho más por sus precios, especialmente los de sus marcas de moda rápida. De media en 2022, el precio de la ropa y el calzado en la Península Ibérica fue un 12% inferior al del resto de la Unión Europea, según datos del instituto de encuestas Eurostat.
Un reinado de precios bajos que se explica, en particular, por la hegemonía en este ámbito de determinadas marcas populares apreciadas por los ciudadanos de toda Europa, como Zara, Pull&Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oysho, Zara Home o Lefties. La razón es sencilla: todas estas marcas de fast fashion fueron fundadas por el mismo emprendedor, el español Amancio Ortega Gaona en 1963 en La Coruña, Galicia. Estas marcas conforman la compañía Inditex, uno de los líderes de la moda en Europa.
Una diferencia de precio significativa
Estas tiendas son considerablemente más baratas en España que en el resto de Europa. Si comparamos Francia y España, por ejemplo, notaremos una diferencia de precio de 7 euros de media por artículo. Si tomamos como ejemplo este vestido de noche de Zara, tiene un precio de 39,95 euros en Francia, Alemania o Luxemburgo frente a los 29,95 euros en España, Grecia y Eslovenia.
¿Cómo se puede explicar esta disparidad?
Hay varias razones para esta diferencia de precio. Primero los impuestos, que varían de un país a otro. El IVA es del 21% en España, frente al 23% en Portugal. Luego, la distancia entre el país de origen del producto y su venta, que influye en el coste del transporte y por tanto incide en el precio final. Y por supuesto, y este es el criterio más importante, el nivel de vida de los habitantes del país y su poder adquisitivo. Los análisis de Inditex luego se adaptan a cada país. Así, los países más ricos de la eurozona, como Francia o Alemania, están viendo cómo los precios se disparan, mientras que los más pobres, como Grecia o España, se benefician de costos más bajos.
En general, cuando se trata de moda, los españoles no son muy gastadores. Gastan una media de 330 euros al año en ropa, cuando la media europea es de 490 euros.
